INCEPTION, la realidad elegida
Advertencia: Los que no hayan visto Inception (El Origen) no deberían leer este artículo porque discute temas centrales de la película y podría arruinar su experiencia al verla. Véanla y vuelvan para leer esto.
Al menos que Christopher Nolan hable algún día (cosa que parece poco probale) el final de Inception será discutido por años sin que pueda darse una solución definitiva. Particularmente creo que no hay UNA solución correcta y quizás tomando en cuenta esa apertura podamos tener una idea más o menos clara de lo que Nolan planteó con la pelicula y con ese final "ambiguo". Si nos quedamos sólo con lo que Nolan nos está dando, la realidad es que la historia termina ANTES de que podamos ver si el tótem sigue girando o se detiene. ¿Por qué? Y ¿Por qué Cobb (Di Caprio) por primera vez en toda la película y en ese momento crucial no espera para ver si su tótem cae o no? Creo que la respuesta de Nolan es: Porque no es lo más importante. Lo importante no es si Cobb despertó o sigue durmiendo cuando finalmente ve la cara de sus hijos. La clave es la DECISIÓN que él ha tomado.
En Inception encontramos dos tipos de personas: Las que necesitan que además de feliz su "realidad" sea VERDADERA y las que pudiendo elegir prefieren CONSTRUIR una "realidad" propia sin importar que sea una ilusión. Cobb le cuenta a Ariadne que cuando él y su esposa Mal se perdieron en el limbo se le hizo insoportable vivir sabiendo que todo era mentira. Que aunque podían jugar a ser Dios, la idea de saber que todo era una ilusión era suficiente para querer regresar y renunciar a todo. Para Cobb la realidad no puede ser sólo feliz, placentera y plena, tambien tiene que ser verdadera. La realidad es igual a lo que sea verdad. El segundo tipo está representado por los durmientes en la tienda de Yusuf, el químico, que van a verlo todos los días para vivir en un sueño compartido y construido por todos. "Ellos vienen aquí a despertarse" dice el viejo que los cuida. "El sueño se ha convertido en su realidad y ¿quiénes somos nosotros para decir lo contrario?" Estos han hecho una elección diferente. La realidad es lo que me haga feliz, la realidad es lo que yo quiero que sea. Que sea verdad o ilusión no le agrega absolutamente nada. Para Cobb la realidad depende de la verdad, para los durmientes depende de la felicidad. Cobb sólo está dispuesto a aceptar una realidad que sea verdadera aún si implica que su esposa está muerta, mientras que los durmientes sólo estan dispuestos a aceptar una realidad que ofrezca lo que ellos quieren. Nolan plantea una dicotomía: Lo que ES versus Lo que QUIERO. Como si nos preguntara: ¿Qué es la realidad para ti? ¿Qué tipo de persona eres tú? ¿Cuál es tu decisión: Enfrentar lo que es o construir lo que quieres? Y cada quien, de acuerdo a lo que siente, piensa y CREE saber, debe decidir si Cobb despertó o no. El final de la película nos obliga a cuestionar y a examinar nuestro concepto de realidad. La clave es nuestra decisión y esto nos lleva a otro punto crítico.
En "The Matrix" Morpheus le pregunta a Neo qué es lo real, si es lo que tocas, lo que sientes y lo que hueles. Y le explica que si la realidad es un tema de PERCEPCIÓN entonces la matriz es tan real como el mundo. Ambas películas cuestionan la asociación que hacemos entre la realidad y nuestros sentidos. Tenemos una tendencia a utilizar el tiempo y el espacio como parámetros de realidad y a comprobarla sensorialmente. Nolan y los hermanos Wachowski nos demuestran que esos parámetros no son suficientes ni adecuados y que quizás la "realidad" sea un concepto que existe en nuestras mentes pero no fuera de ellas. Pensemos en esto un momento: Cobb decidió que la realidad eran sus hijos y específicamente volver a VER la cara de sus hijos. Donde fuera que el pudiera volver a verlos ESE sería el mundo real. Entonces, al final ¿los ve porque realmente despertó o los vió porque CREYÓ que había despertado y le permitió a su subconciente enseñarle sus rostros? Pareciera que sin una referencia espacio-temporal sólo nos queda la memoria y lo que creemos saber para decidir qué es real y qué no. Y cuando la realidad puede ser perfectamente SIMULADA, cómo podemos confiar en nuestros sentidos y recuerdos.¿Que tan seguros podemos estar?
Después de verla dos veces y meditar sobre el sentido de las preguntas hechas por Nolan creo que de algún modo todos modificamos y personalizamos el mundo que percibimos y lo convertimos en NUESTRA realidad y que quizás aquello que está afuera de nosotros sea en última instancia inaccesible porque nunca podemos llegar puros y transparentes. Nuestras emociones, nuestros deseos, nuestros miedos y nuestras decisiones le dan forma al mundo y en ocasiones incluso lo vamos construyendo en el camino. Como dijo Neo: Choice. The problem is choice.
Una pequeña nota para reflexionar: Hoy, en una época en la que todavía no existe un programa (the matrix) o un químico (inception) capaz de simular perfectamente la realidad y crear una réplica del mundo y sus fenómenos es fácil distinguir la realidad de la fantasía. Pero qué pasará con nosotros cuando podamos sumergirnos en un mundo que se SIENTA tan real como la vida misma. ¿Podremos distinguir la realidad de la fantasía? y más importante aún ¿vamos a querer distinguirla?
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